Page 107 - El rostro de las letras
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    90 RETRATOS PARA TODOS
Madrid. Para entonces, decenas de profesionales se habían esta- blecido ya en la capital de España. La década de los años sesenta fue pródiga en la creación de gabinetes fotográficos, que pronto hicieron la competencia a los clásicos de José Albiñana, Charles Clifford, Laurent, Martínez Sánchez, Alonso Martínez, Martínez de Hebert y Juliá. Los anuarios y guías de la época reflejan un salto considerable entre los 14 estudios de 1862, los 37 de 1863 y los 62 de las vísperas revolucionarias. Entre aquellos estudios, conviene recordar los creados por José Vasserot, José María Nieto, José Bueno, C. Cano y Compañía (“primer miniaturista de cámara de S.M.”), Rafael Castro Ordóñez (“pintor de historia”, autor de las fo- tografías realizadas durante la expedición científica del Pacífico de 1862), Antonio Selfa y Alfonso Begué. Los alicantinos, José, Pedro y Salvador Albiñana fueron ante todo daguerrotipistas, quizás los mejores que trabajaron en la capital, especialmente José (Sagra, 1821-1875), que gozó de un gran prestigio por su condición de re- tratista de Isabel II. De él son algunos de los mejores daguerrotipos escénicos españoles, conservados en el archivo del Patrimonio Na- cional. Tras el destronamiento de la reina, en 1868, José traspasó su estudio de la calle de Alcalá, dejando el negocio en manos de su hermano Salvador, uno de los mejores retocadores e iluminadores de su generación.
José Martínez Sánchez (Madrid, 1808) se estableció en Valencia hacia 1850, y meses más tarde se residenció definitivamente en Madrid. Para entonces era ya conocido como un sobresaliente innovador de las técnicas fotográficas. Gracias a sus preparados de “colodión instantáneo al aire libre” logró realizar con un objetivo de 5 1⁄2 pulgadas varias tomas del paso del cortejo fúnebre del escritor y periodista Calvo Asensio por la madrileña Puerta del Sol en 1863, una de sus grandes exclusivas 33. Sus mejores retratos conocidos corresponden a las vísperas de la masificación de la carte-de-visite. De los años que siguieron son sus conocidos retratos-mosaico, que compitieron en popularidad con los realizados por Laurent. De Pedro Martínez Hebert (Vitoria, 1830-Madrid, fecha desconocida) se conoce su célebre Galería de Personajes “que ha alcanzado celebridad en el mundo”. Miniaturista notable y magnífico retocador e iluminador, pronto se convirtió en fotógrafo de cámara de Isabel II, Amadeo de Saboya y Alfonso XII, del que realizó en 1878 el reportaje oficial
de su boda con María de las Mercedes de Orleáns. Otro retratista
Los fotógrafos José Albiñana (1) y Salvador Albiñana (5), con los miniaturistas Francisco Reigón (4), Domingo Muñoz (2) y Gabriel Do- mínguez (3). Hacia 1855 (Biblioteca Nacional de España)
 33 Martínez Sánchez anunciaba sus productos e innovaciones en las revistas técnicas de la época. En el número 16
de El propagador de la fotografía, se refería el fotógrafo a su instantánea del entierro de Pedro Calvo Asensio, “que aun a pesar de la poca luz por lo avanza- do de la tarde, era de una gran claridad” (Cádiz, 15 de octubre de 1863). Citado por Rafael Garófano en El propagador y el eco de la fotografía. Publicaciones pioneras sobre fotografía en España. 1862-64, Centro Andaluz de Fotografía, Almería, 2005.




























































































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