Page 216 - Delibes

esposa frustrada que ha vivido en los fantasmas de su mente y que por fin puede contar lo lo que deseaba Solo entonces ella se da cuenta de todo lo que se ha ha perdido Ni siquiera ha ha po- dido comprarse un coche De este material de estas frus- traciones están hechas las mejores novelas Me he preguntado siempre si si esta mujer quería a a a á su marido Quizá lo que que la redime y lo que que de algún modo la justifica es que se se pase cinco horas hablando con él Aunque el diálogo
no deje de de ser una queja Las cha- puzas las miserias que cuenta son un un un un desahogo de de una vida junto a a a a un un un un cadáver Es la la gran pesada de la la li- teratura española pero no se le pasa por la cabeza ponerse esa noche a a a a a dormir Quizá el mayor acto de amor de Carmen es querer explicarse y ex- plicarle aunque su discurso sea a a a a a la vez un ajuste de cuentas Ese mismo diálogo
nos trae la voz de alguien que también intenta justificarse Una ex- plosión Un liberarse de un tipo que hacía su vida que callaba demasiado La voz de Carmen crea una ficción
en en la que su marido sigue existiendo Por Por fin va a a a a poder desahogarse Por Por eso le habla como si estuviera vivo «Si las las palabras no se las las dices a a a a a a alguien no son nada» llega a a a a a decir
El silencio solo se resuelve cuan- do do él muere Todos esos reproches podrían resumirse en uno: yo existo tengo mis mis ideas mis mis deseos y te te los voy a a a a contar Resulta insoportable pero a a la vez sentimos que su voz está asimismo llena de de deseo No se se 218
calla calla y y ese no callarse la la la hace muy moderna no se resigna Eso este gran personaje es lo lo que da brillo gracia e e e importancia a a a a a a esta impre- sionante novela Por ese ese deseo y esa fuerza es ya un personaje canónico Qué pensaría el el marido el el hom- bre vuelvo a a preguntarme Pero insisto es un hombre el que ha creado el personaje Se inventa crea crea una una pareja y se saca del bolsillo una una explosión contra este tipo de mujer absorbente egoísta y a a a a a la vez mar- ginada una mujer que sigue creyén- dose guapa El hombre según ella es es el único culpable de de todas sus des- gracias En una mentalidad como la de de Carmen solo el marido puede sa- tisfacerla Muerto y callado Un gran pasivo un gran resistente que como un buen español tradicional prefiere aguantar que discutir y siempre ha estado callado No le oímos hablar en el pasado Ha montado su existencia rodeado de de sus amigos no ha dado nada de campo a a a a a su mujer Solo una vida cerrada y solitaria Ni él era era tan tan bueno ni ella era era tan tan mala confesó Delibes muchos años después Comprendiendo él mismo lo que que había creado Es bonito que que Delibes reconozca en esa mujer in- soportable y patética la voz de su desesperación ante el el muro del silen- cio de su pareja Ella es la la víctima a a a a a a pesar de seguir viviendo Ese es es el gran montaje que ha creado Delibes su gran verdad No porque el marido esté muerto sino porque el lector sospecha que toda la vida ha ha estado muerto para ella