Page 75 - El retrato español en el Museo del Prado

El de Saturnina Canaleta, esposa de Girona, es uno de los más elegantes retratos femeninos del artista. Como en otros retratos de parejas que realizó, el de la mujer estaría a la izquierda y así el elegante gesto de las manos, enguantada una de ellas, apunta directamente a la efigie de su marido, situada a la derecha. El juego con los guantes, frecuente en algu- nos retratistas activos en el II Imperio, como Jean-Auguste-Dominique Ingres y Édouard Dubufe, aparece ya en el retrato de Francisca de Sales Portocarrero y Palafox, duquesa de Alba (Sevilla, Casa de Alba), que había realizado el año anterior.
El vestido, con un broche de diamantes en forma de pinjantes en el escote, deja los hombros, finamente modelados, al descubierto. También de bri- llantes y engastados en oro, la sortija, los pendientes y el brazalete relucen sobre las delicadas carnaciones y acentúan la riqueza del vestido, de rica cachemira. El cortinaje, estudiadamente difuminado, resulta habitual en este tipo de retratos femeninos.
El diario del pintor permite documentar la realización del retrato, al que se refieren apuntes del 22 de enero de 1856, día en el que anota que comenzó el retrato, en el que trabajó también los días 23, 24, 25 y 26 de aquel mes. Pintóeltrajelosdías14,15,16y18defebrero,yel21yel22deesemismo mes trabajó en el fondo del retrato. Quedó éste interrumpido, pues no hay anotaciones hasta el 8 y el 10 de noviembre del mismo año de 1856, días en los que señala que acudió la modelo a posar, y sólo el 18 de noviembre dio por terminado el retrato. El artista cobró por ambos dieciséis mil reales, la misma cantidad que ingresó por los retratos de Segismundo Moret y su esposa. Como éstos, los enmarcó en rica moldura dorada de esquinas redondeadas, que conservan.
JAVIER BARÓN
BIBLIOGRAFÍA: González López 1981, pp. 179-80, n.os 383-84; Puente 1985, pp. 167-68; J. L. Díez en Madrid 1994, pp. 270-72, n.os 54-55; J. Barón en Santa Cruz de Tenerife 2010-11, pp. 150-53, n.os 58-59
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