Page 65 - Barbieri. Música, fuego y diamantes
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BARBIERI, «MÚSICO Y COPLERO»: REFLEXIONES SOBRE SU TEATRO MUSICAL María Encina Cortizo
A la zarzuela le debo lo que soy
Barbieri, «Carta a D. Pascual Millán» La Zarzuela, Madrid, 1887
Francisco Asenjo Barbieri (1823-1894) es, junto con Emilio Arrieta (1821-1894) y Joaquín Gaztambide (1822-1870), el gran músico de la España de mediados del siglo xix. Su producción musical, dedicada al teatro lírico español –con la excepción de la ópera Il Buontempone (1847), la Sinfonía sobre motivos de zarzuela (1873) y algunas danzas orquestales, himnos, cantatas y canciones–, reúne setenta y seis zarzuelas1, que reflejan el renacimiento y evolución del género lírico nacional en un lapso de cuarenta y un años, desde 1850, fecha de estreno de Gloria y peluca –sátira amable del conflicto que vivía su generación musical «emparedada» entre el canon italiano paneuropeo y la sentida necesidad de hacer resurgir el teatro lírico nacional–, hasta su última obra, El señor Luis el tumbón o Despacho de huevos frescos (1891), sainete lírico de Ricardo de la Vega, tan solo tres años antes de su muerte.
1. ZARZUELAS GRANDES Y CHICAS EN PRO DEL ARTE LÍRICO NACIONAL
La obra de Barbieri revela la rápida e intensa evolución de las formas líricas en la segunda mitad del siglo xix, en un momento en que el teatro lírico español había recuperado el favor del público a través del nacimiento de la Zarzuela grande con Jugar con fuego (1851), que Barbieri pone en música sobre un libro de Ventura de la Vega. Tras esta obra, el compositor será el impulsor de una doble tendencia creativa que pronto asumen los más importantes compositores contemporáneos –Joaquín Gaztambide, Emilio Arrieta, Cristóbal Oudrid o José Inzenga, entre otros–: por una parte, componer obras en el nuevo modelo de Zarzuela grande en tres o cuatro actos, con la obsesiva aspiración romántica de la ópera nacional; y mantener vivo un molde teatral breve que, recurriendo a formas de larga raigambre en nuestra cultura teatral desde las farsas, loas, fiestas, églogas, entremeses, sainetes o tonadillas, emplee
Página anterior: techo del Teatro de la Zarzuela de Madrid, composición y dibujo de Manuel Castellano y Francisco Hernández, grabado de V. Urrabieta. BNE [cat. 81].
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Véase: Emilio Casares: Francisco Asenjo Barbieri. 1. El hombre y el creador. 2. Escritos. Madrid, ICCMU, 1994.