Page 364 - El rostro de las letras

TIEMPOS NUEVOS
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En su juventud, Ramiro de Maeztu fue inseparable de Azorín y Pío Baroja. Luego, la vida y la literatura pusieron a cada uno en su sitio. Este retrato lo dedicó Maeztu a Ortega, y fue tomado en un estudio de Londres. Hacia 1910 (Fundación José Ortega y Gasset- Gregorio Marañón)
SANTOS YUBERO. Ramiro de Maeztu durante una de sus conferencias en los locales del partido ultraderechista Acción Española. Madrid, hacia 1935 (Archivo Regional de la Comunidad de Madrid. Fondo Fotográfico Martín Santos Yubero)
entre ellos, los escritores Rafael Dieste, Juan Rejano, Manuel Andújar, Benjamín Jarnés y Pedro Garfias. Cuatro años después de su llegada a México, la edad y las heridas de la guerra y del exilio acabaron con su vida. Se le dio tierra junto a su mujer, Leona Balza, en el cementerio español. A Ramiro de Maeztu (1875-1936), las fotografías lo muestran alto, corpulento, elegante como un fellow de Oxford, mirada de iluminado, el gesto vehemente, de persona
de imprevisibles reacciones, como le describió Pío Baroja en Las noches del Buen Retiro, transmutado en el personaje orgulloso de Jaime Thierri.