Page 16 - Anuario AC/E de cultura digital 2025

Memories of Passerby I, obra de Mario Klingemann.
Anuario AC/E de cultura digital 2025
La cantante Maria Arnal, en colaboración con el
Barcelona Supercomputing Center (BSC-CSN),
ha explorado nuevas voces y oralidades. Una
investigación que rastrea los límites físicos de
la voz humana y donde, por ejemplo, la artista
ha podido experimentar cómo sonaría su voz si
su laringe midiese un metro o si la juntase con
vocalizaciones de animales. Sonidos imposibles
que han visto su resultado en proyectos como
Impossible Larynx o Maria Choir. Una colabo-
ración entre músicos, científicos y expertos en
inteligencia artificial.
En la feria de arte contemporáneo ARCO de
2024, la IA también encontró su hueco. Daniel
Canogar, artista contemporáneo que se mueve
entre lo tecnológico y lo digital, expuso Scroll,
donde los trending topics de la red social X (la
antigua Twitter) se transforman en grafitis. En
Last Seen, una serie de pequeñas piezas de flores
extinguidas, Daniel G. Andújar superpone tres-
cientas palabras que la IA generativa califica de
inapropiadas al hacer referencia al sexo, la violen-
cia u otros temas de naturaleza inquietante. Una
obra que quiere abrir un debate sobre la censura
y la cancelación que imponen aquellos que crean
y entrenan a estos sistemas. También estuvo en
esa edición Marina Núñez con su serie Botánica
I y II, impresiones digitales sobre aluminio que
representan dos rostros femeninos cubiertos por
un encaje transparente del que florecen unas pe-
queñas gotas. Dentro de ellas se pueden apreciar
macrouniversos de plantas, esferas creadas con
inteligencia artificial.
La artista Maria Arnal ha podido
experimentar cómo sonaría su voz si su
laringe midiese un metro o si la juntase
con vocalizaciones de animales. Sonidos
imposibles que han visto su resultado en
proyectos como Impossible Larynx o
Maria Choir.
La naturaleza también es el territorio elegido por
Sofía Crespo, que suele usar técnicas de apren-
dizaje automático y algoritmos genéticos para
crear formas de vida híbridas y especulativas que
difuminan las fronteras entre lo orgánico y lo ar-
tificial. En Neural Zoo muestra criaturas marinas
y plantas fruto del entreno de redes neuronales
capaces de generar organismos complejos, cria-
turas imposibles que solo cohabitan en entornos
digitales, ampliando el imaginario biológico de
nuestra realidad.
En 2015, Sougwen Chung comenzó a explorar la
interacción con ordenadores. Entrenó durante
dos años una red neuronal con dos décadas de
sus pinturas y dibujos. Esa red está conectada
a un brazo robótico llamado DOUG (siglas de
Unidad de Operaciones de Dibujo: Generación
2), diseñado para dibujar conjuntamente con la
artista. Una dupla humana-máquina con la que
Chung ha creado cientos de obras. Su estilo
ha evolucionado. En Body Machine (Meridians)
imagina la extensión de la forma robótica en
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CREATIvIDAD EN LA ERA DE LOs ALGORITMOs, UN NUEvo esPACIO CREATIvO ·
MANUEL GONzáLEz HERNáNDEz