Page 121 - Barbieri. Música, fuego y diamantes
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LA BIBLIOTECA Y EL ARCHIVO DE FRANCISCO ASENJO BARBIERI EN LA BIBLIOTECA NACIONAL DE ESPAÑA
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en el Archivo de la institución pueden consultarse otros expedientes muy anterio- res relacionados con este fondo y que denotan un interés temprano del compositor en que su colección quedara en la Biblioteca. La primera prueba de ello es la venta a la institución de ocho libros antiguos no musicales el 25 de mayo de 186812. Años más tarde, el 11 de octubre de 1880, también registró una donación de 62 volúme- nes impresos y un manuscrito y, finalmente, hizo una tercera entrega con fecha 23 de octubre de 1885, acompañada de una carta al director de la Biblioteca redactada en su típico estilo llano y desenfadado: «Los cestones adjuntos contienen multitud de obras de música práctica, que sirvieron durante muchos años para mi estudio y recreo, y que ahora quiero regalar a la Biblioteca Nacional, que Vd. tan dignamente dirige, para evitar que después de mi muerte sean presa de los bibliopiratas»13.
No obstante, todo el patrimonio bibliográfico y documental atesorado por Bar- bieri (a excepción de algunos autógrafos conservados en el archivo de SGAE y en la Biblioteca del Real Conservatorio Superior de Madrid) tardó más de un siglo en reunirse definitivamente en la BNE: casi todas sus partituras autógrafas, que tras su muerte quedaron en manos de la familia, fueron finalmente adquiridas por el Estado en subasta pública celebrada el 17 de junio de 1999, e ingresaron en la Biblioteca Nacional en septiembre de ese mismo año. La circunstancia de que sus composicio- nes manuscritas no fueran incluidas en el legado de 1894 puede explicarse por el deseo del compositor de que permanecieran bajo el control de su familia, que po- dría así explotarlas y obtener beneficios de la edición e interpretación de las obras14.
12
La compra se hizo por la cantidad de 3.000 reales «pagaderos en el término de un año».
13
Nieves Iglesias Martínez: «Barbieri y la Biblioteca Nacional». Scherzo, ix (1994), n. 89, pp. 108-110.
14
Desde que en 1855 fue víctima de una edición pirata de su obra Jugar con fuego por parte del editor Casimiro Martín, Barbieri estaba muy sensibi- lizado en todo lo relativo a la protec- ción de los derechos de propiedad; quizá por ello aceptó, años más tarde, formar parte del comité de redacción de la Ley de Propiedad Intelectual de 1879.
Facsímiles de códices musicales existentes en la librería del Cabildo toledano sacados para Barbieri, Toledo, 1869. BNE, M/813.
Grabado de Cosme José de Benito, copista de Barbieri. Ilustración Musical Hispanoamericana, 15-10- 1888, p. 137. BNE, MI/58.