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Y, sin duda, una muestra clara de la diversifica-
ción en el acceso a contenidos está en cómo
se consumen ahora películas y series. Durante
el siglo xx, Estados Unidos fue el mercado
dominante en la cultura audiovisual. Las series
de moda y los taquillazos de cine llegaban desde
allí.18 El salto a internet del consumo audiovi-
sual ha multiplicado la oferta. Cierto es que
el mercado del streaming sigue dominado por
grandes players estadounidenses, como Netflix o
Amazon, pero cierto es igualmente que sus pro-
ducciones son cada vez más variadas geográfica-
mente y que la población global está ampliando
su paladar audiovisual. Las series de moda se
han diversificado, como se ve en el boom de los
contenidos surcoreanos. La estrategia del país
para convertirse en una potencia económica en
el área cultural (lo que explica, por ejemplo, el
boom del k-pop) ha ayudado, pero cabe pregun-
tarse si el streaming y otros servicios de internet
que simplifican el descubrimiento han sido claves
para lograr este éxito arrollador. El 60 % de los
espectadores de Netflix ya han visto19 contenido
surcoreano al menos una vez. Tanto Netflix
como Amazon ya producen la mitad20 de sus
contenidos fuera de Estados Unidos. Para algu-
nos países, el contenido en la era del streaming
se ha asentado como una potencial fuente de
riqueza e ingresos: el ICEX y Parrot Analytics
calculan que entre 2020 y 2024 las series y las
películas españolas generaron21 5100 millones de
dólares en ingresos globales en las plataformas.
Hasta en los países de habla inglesa (tradicional-
mente reticentes al consumo de productos cul-
turales en otras lenguas) el visionado frecuente
Anuario AC/E de cultura digital 2025
18 Esto no solo impactaba en los patrones de con-
sumo audiovisuales, sino también en la sociedad y
en la cultura en un modo más amplio. Los mundos
soñados eran los de las sitcoms estadounidenses.
19 https://www.dw.com/en/why-is-netflix-pouring-
billions-into-south-korean-shows/a-65480359
20 https://variety.com/2024/tv/global/global-strea-
mers-shift-approach-2023-report-1235886396/
21 https://variety.com/2024/film/global/icex-pa-
rrot-analytics-mipcom-society-of-the-snow-
nowhere-1236183527/
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CULTURA y AGENDA 2030
·
RAQUEL C. PICO
de contenidos audiovisuales de otros lugares ha
subido en un 24 % desde 2024, según datos22 de
Ampere Analysis. La mitad de los internautas
de esos países confiesan que ya ven este tipo de
producciones, una cifra que sorprende cuando se
echa la vista atrás.
Uno de los problemas importantes de
internet en general y de la cultura digital
de forma específica es cómo puede afectar
a su riqueza el dominio de una potencia
económica y de su cultura.
Se trata de ingresos, pero también de nuevas
fuentes, historias y puntos de vista. Esto importa
y mucho, porque uno de los problemas impor-
tantes de internet en general y de la cultura
digital de forma específica es cómo puede
afectar a su riqueza el dominio de una potencia
económica y de su cultura. La gran pregunta es
qué ocurre cuando internet nos llega de Estados
Unidos y muestra, por eso, el mundo bajo ese
prisma. El boom de la inteligencia artificial ha
puesto todavía más sobre la mesa esta cuestión.
Estados Unidos —y China en menor medida—
está liderando su desarrollo. La IA se adapta así
a cómo se ve el mundo en esos entornos y la
cultura que transmite es la de sus creadores. Las
lenguas en posiciones más minoritarias corren el
riesgo23 de verse arrasadas por este crecimiento
arrollador de los idiomas dominantes de la Red.
Una lengua no es solo un vehículo para enten-
derse, sino también un testigo de los derechos
de sus hablantes, de cómo ven el mundo y de
sus tradiciones y conocimientos. Cuando desa-
parecen en una internet dominada por un grupo
reducido de gigantes, se están llevando también
su cultura.
22 https://www.ampereanalysis.com/press/release/
dl/frequent-viewing-of-foreign-language-content-
up-24-in-english-speaking-markets-in-four-ye
23 https://vinte.praza.gal/artigo/intelixencia-artifi-
cial-ten-siri-o-celga-4-galicia-busca-a-sua-sobera-
nia-dixital